En el año 2004 apareció un nuevo desafío. Los productores apícolas de la zona, un poco alarmados por las exigencias del Servicio Nacional de Sanidad Animal (SENASA) solicitan a nuestra Entidad la construcción de una sala de extracción que cumpla con las normas y requisitos que la dependencia oficial pide, de tal manera que con un solo esfuerzo se logre la sustancial mejora en la calidad de la miel que extraída en condiciones no adecuadas tienen problemas de colocación en el mercado nacional y principalmente en el internacional.-